El túnel Guillermo Gaviria Echeverri, ubicado en el alto del Toyo en Antioquia, enfrenta un riesgo significativo de convertirse en una infraestructura inutilizable debido a problemas de financiamiento en el tramo correspondiente al Gobierno Nacional. Aunque la Gobernación de Antioquia se compromete a entregar su sección en el primer semestre de 2024, el tramo bajo la responsabilidad del Instituto Nacional de Vías (Invías) se encuentra rezagado en un 45%, y el Gobierno afirma carecer de los fondos necesarios para completarlo.
Esta situación crítica tiene raíces en la historia del proyecto. Inicialmente concebido como parte de las Autopistas de la Montaña durante el gobierno de Álvaro Uribe, posteriormente renombradas como Autopistas de la Prosperidad bajo Juan Manuel Santos, el proyecto se dividió en nueve secciones para ser construido por empresas privadas. Sin embargo, los concesionarios privados no encontraron viable la construcción del túnel del Toyo debido a la dificultad para recuperar costos mediante peajes.
En 2015, el entonces gobernador Sergio Fajardo y el alcalde Aníbal Gaviria tomaron la iniciativa de financiar el proyecto con fondos públicos, una colaboración inusual entre gobiernos locales y el Invías. La Alcaldía de Medellín aportó $840,000 millones, mientras que la Gobernación contribuyó con $1.3 billones.
El tramo financiado con fondos públicos abarca 39.5 kilómetros entre Santa Fe de Antioquia y Cañasgordas, enfrentando una topografía desafiante que requiere la construcción de 18 túneles y 30 puentes. Actualmente, el túnel del Toyo se encuentra en un 85% de avance, con la expectativa de ser entregado en el primer semestre de 2024.
El inconveniente crítico radica en el tramo 2, asignado a Invías, que va de Santa Fe de Antioquia a Giraldo. Invías, responsable de instalar equipos electromecánicos en el túnel, enfrenta un déficit de $550,000 millones y ha expresado que su financiamiento se agotará en marzo o abril del próximo año. La falta de fondos del Gobierno Nacional para este tramo pone en riesgo la utilidad del túnel del Toyo, a pesar del avance en el tramo gestionado por la Gobernación de Antioquia.